Ni frío ni calor

Cogemos la pelota de básquet, dicen que quieren ir a la pista.
– ¡Va, mamá, bótala que te la cogemos!

Es un paseo. La niña la sabe botar. El niño está a años luz de conseguirlo. Es está enfadando. ¡¿Cómo puede ser tan patoso?! Ni se inmuta.

– Venga, va, si la botas tres veces serás el primero escogiendo donde te sientas para cenar.

No le importa lo más mínimo. Me exaspera. Intento no perder la paciencia. De hecho yo no tengo ni idea de un montón de cosas que no me interesan… Ve la pelota y casi se asusta. Respiro mucho. Deciden que se la pasan. Pelotazo en la cara.

-¡Si no sangráis! ¿Quién me la pasa?
Me la medio pasan.

Mañana volveremos.

Anuncio publicitario

Deja una respuesta

Introduce tus datos o haz clic en un icono para iniciar sesión:

Logo de WordPress.com

Estás comentando usando tu cuenta de WordPress.com. Salir /  Cambiar )

Foto de Facebook

Estás comentando usando tu cuenta de Facebook. Salir /  Cambiar )

Conectando a %s

A %d blogueros les gusta esto: