Me gusta la ilusión de los niños. La previa de lo que sea. Los nervios por lo que pasará. El ¿Me explicas qué haremos? O ¿Cuántos días faltan? Un ciclo que se retroalimenta. Ellos tienen ganas y tú las fomentas. Por fin llega el día. Todos estamos contentos. Este año hemos repetido el The Family Run. Hemos corrido y nos hemos esforzado. Hemos sudado y nos hemos ganado las medallas que nos han dado. Hemos hecho pocas fotos pero tenemos el recuerdo claro en la cabeza. Llegar a la meta, las manzanas, pasar la mañana con amigos, la comida, la siesta… Y el ¿Sabes qué mamá? ¡¡¡Has corrido super!!!
Éso, super.