Ésta podría ser una buena casa para vivir. Hagamos como si el dinero no fuera un problema para conseguirla. ¿Viviríamos en ella? Depende.
Cuando tienes hijos hay un montón de prioridades que tienes en cuenta: alguna guardería y escuela que nos gusten suficiente para los niños, parques, espacios para jugar, un barrio agradable, proximidad con el trabajo, servicios de calidad, sin suciedad, poca contaminación, la proporción de verde y asfalto, accesibilidad por carretera, buena combinación con el transporte público y un largo etcétera que variará en función del criterio de cada uno. En medio de este paraíso tenemos la casa de nuestros sueños.
Pero como pasa después del gordo de Navidad… no hace falta ser tan exigente. Si tenemos salud ya es suficiente.
Casa del arquitecto John Lautner
Yo sacrificaría algunos de los requisitos «indispensables»…
No es para menos…